sábado, 4 de abril de 2020

Compartir lo mejor de nosotros.

  Tenía muchas dudas sobre poner una publicación de este tipo y en estos días se me ha despejado esta duda. 

  Soy maestra, maestra de Infantil. Los maestros estamos envueltos permanentemente en una confusión sobre lo que realmente damos en nuestro trabajo y lo que se percibe. Esta presión social intento llevarla con cierta resignación enfocándome en lo que me hace sobrellevar dicha presión y el poco reconocimiento social pensando “ nunca llueve a gusto de todos, para mi se queda el esfuerzo diario y la paciencia que crece con los días, mi trabajo solo lo veo yo…”.

 Muchos tirones de orejas; de vez en cuando se echa de menos una palmada en la espalda, que a todos nos gusta.

  Hasta ahora medio se llevan las burlas de qué bien estamos los maestros, cuántas vacaciones…Son tantos años. Escuchas llover y te muerdes la lengua (hasta que te sangra) cada vez que alguien se queja de su trabajo y me dice en mi cara lo bien que estoy con los peques. ¿Qué necesidad tengo yo en mi tiempo libre de discutir para defender mi trabajo en el que me dejo el pellejo?. No suelo yo desmerecer el trabajo de los demás. En nuestro trabajo estamos continuamente en modo multitarea, a pesar de ello hay familias que piensan que no estamos atentos para que su hijo no se caiga, no se pelee, no salga con un arañazo, no escuche una palabrota… (que suele pasar también en las casas por cierto).

  Cuando llegamos a casa o nos dan esas envidiables vacaciones echamos muchísimas  más horas de lo que alguien se pueda imaginar.

   Durante estos días de confinamiento seguimos “entregaos” a nuestro trabajo. 

   Las circunstancias me han ayudado a tomar esta decisión y publicar. Esta pandemia es una situación única en nuestra vida, excepcional y creo que debemos parar y pensar en lo realmente importante ahora, pensar en la salud física y mental. Aún así hay familias de peques de Infantil que están preocupados por las tareas escolares que están “perdiendo”. La maestras de infantil del Equipo al que pertenezco estamos aportando muchísimas ideas, herramientas necesarias para que jueguen y se diviertan en casa (da la casualidad que en estas edades se aprende jugando) aprendiendo sin apenas darse cuenta. Saturadas de mensajes, de intentar dar todo lo que se nos pide, que forma parte de nuestro trabajo por supuesto. Sin embargo algunas familias de alumnos de Infantil continúan apretando un poco más los tornillos, preocupados por los boletines de notas que aún no tienen y por libros que se quedaron en el colegio, y que no se pueden dar porque todos debemos permanecer en casa. ¡Qué pena!, porque como suele pasar son una minoría y son los que más ruido hacen, ensuciando el ambiente de tranquilidad que intentamos transmitir en el día a día y desmereciendo nuestro trabajo.

  Es una impotencia muy grande trabajar sin descanso desde tu casa para aportar ideas lúdicas con las que aprendan y avancen en los ámbitos correspondientes a estas edades jugando, sobrevivan estos días en un ambiente de juego distendido y ver que a una minoría  lo único que le importa son papeles papeles y más papeles, de manera que esta pandemia no les impida ir a la Universidad. 

  Mi reflexión sencillamente es: vamos a pensar en la salud, en salvar nuestra salud física y mental que es lo que realmente importa en estos momentos. Los maestros vamos a seguir trabajando en casa, pero (al menos en mi caso) sin pretender hacer un trabajo individualizado diario como si de un día normal se tratara, seguramente echando más horas de las que entran en un horario lectivo. 

 Esta situación de pretender continuar como si no pasara nada no hay quien la resista. Vamos a cuidarnos unos a otros y a pensar en nuestro bienestar en medio de todo este caos que a todos nos afecta. En el bienestar de todos, en sobrevivir a esta situación, familia y maestros.
  
   Hoy comparto mi perfil ya compartido, por si a algún maestro le interesa compartir.

Vamos a compartir lo mejor de nosotros.

Espero que os guste y os resulte útil.





Os invito a seguirme en YoutubeFacebookInstagram  y Pinterest me encantará veros por allí.

Si tienes alguna consulta puedes dirigirte a anmaluim@gmail.com.

 Mil gracias por vuestras visitas y comentarios.

 Mi bienvenida a quienes os animáis a acompañarme en este rinconcito.

6 comentarios:

  1. Es una profesión que siempre he respetado y admirado.
    En estos días de confinamiento muchos padres van a entender mejor la gran labor que haceis.
    Maravilloso perfil y maravillosa reflexión, querida
    Besitos

    ResponderEliminar
  2. Siempre ha apoyado y ayudado a los maestros de mis hijos porque tenía claro que de ellos dependía una parte importante de la educación de mis hijos. Te entiendo cuando dices que se necesita una palmadita de agradecimiento de vez en cuando, yo también la quisiera y no siempre se produce. Te felicito por la dedicación y entusiasmo que vemos le pones a tu trabajo y estoy segura que hay mucha gente que lo valora.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Magnífica reflexión y muy bien hecho en publicarla, Inmaculada. Nosotras hemos defendido siempre a los profesores de nuestros hijos por encima de todo, igual que hacían nuestros padres con nosotros, y siempre nos ha ido muy bien y hemos tenido una magnífica relación con todos ellos. Además, siempre hemos valorado la inmensa labor de enseñar a tantos pequeñajos a la vez, día a día. Nosotras que vemos a través de este blog, la entrega y dedicación que pones en tu trabajo, estamos seguras de que cuentas con el apoyo y la valoración de la mayoría de los padres.

    Un beso enorme de las dos

    J&Y

    ResponderEliminar
  4. Muy buena reflexión.
    La mayoría de padres creemos que les preocupa más la salud de sus hijos que un boletín de notas.
    Siempre hay el ruidoso de turno pero la mayoría seguro valoran el trabajo d un profesor.
    Muchos besos y cuídate mucho

    ResponderEliminar
  5. Hola Inmaculada, he leído atentamente todo lo que has escrito y no has podido transmitirlo mejor. Lo hemos hablado en otras ocasiones, esa minoría son los que empañan y obstaculizan el trabajo docente y me consta, que el tuyo y tu labor es impecable. Ánimo amiga, a seguir haciendo tu trabajo como tú sabes hacerlo. Un beso y cuidaros mucho!!

    ResponderEliminar
  6. Sin duda Inmaculada tu reflexión es la de una persona responsable y comprometida con su trabajo y profesión vocacional, quédate con esa tranquilidad que da saber que cumples con tu trabajo, seguro que hay mucha más gente que te lo reconoce y valora....a ver si con ese perfil entienden cual es la situación real y cuales son las prioridades ahora.

    BESOS

    ResponderEliminar